Todo el día || Todos lados
Oh, pero qué hermoso día para un fresco paseo bajo este gélido rocío, bien envueltos en sus abrigos y bufandas. O, tal vez, consideren que sea un mejor momento para quedarse en sus casas, en sus iglús, en sus hogares temporales, bien envueltos bajo una manta, o entre los brazos de alguien más.
Dentro o afuera, pronto comprobarán que la nieve no es la única visitante del día de hoy.

Ah, sí. El viejo enemigo. El fruto del caos. La silenciosa amenaza pendiendo sobre sus cabezas como las garras del destino.
El inexorable muérdago.
La H. Gerencia parece haber recordado otra añeja, añejísima tradición de estas tierras, y decidido hacerle un breve homenaje. Porque aunque no haya árbol de navidad o regalos para todos, la nieve y las plantas de muérdago mágico apareciendo en cualquier lugar en los momentos más inesperados, son suficientes para recordarnos a todos la cálida maravilla y la felicidad de celebrar Navidad en... julio. O agosto. Como sea.
Los habitantes de Nadalandia, más familiarizados con estas pequeñas plantas que las visitas, probablemente ya sabrán que el único modo de evitar quedarse atascados para siempre bajo ellas es cumplir una simple condición: besar a la persona con la que hayan quedado atrapados. Pero no se confíen, porque tal vez, en esta ocasión, la Gerencia ha preparado una sorpresa también para ustedes: no todos los frutos de los muérdagos son rojos, ni todos parecen considerar un beso como un precio aceptable por su libertad.
No se preocupen, si tardan en darse cuenta de esto, una nota caerá desde la planta para explicarles gentilmente qué es lo que se espera de ustedes.
Disfruten del día. Y la H. Gerencia les desea, sinceramente,
((¡Cuarto post de nuestro evento de Cuarta Pared! Los efectos diferentes dependiendo de cada muérdago están linkeados en el mismo post. Y aquí pueden encontrar una lista constantemente actualizada de los personajes visitantes, y por aquí un cronograma del evento.))