[El día de hoy, a unos pasos afuera de la mansión, hay una rara visión: cierto pelirrojo bookworm troll que, en lugar de estar a) trolleando a alguno de sus amigos o b) en la biblioteca, en lugar de eso está amarrado a una silla y, por su cara, sin forma alguna de soltarse y con una cara que es mezcla de resignación y mezcla de 'alguien téngame piedad y máteme'. Arriba de él hay un letrero, grande, grandote.
"Libre para el badtouch".
¿Verdad que de repente tiene sentido la cara del pelirrojo?]