Jun. 7th, 2020 at 9:12 PM
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ESTA ES LA TEMPORADA.
Eso es. Eso es todo lo que necesitan saber. El mensaje se lee claro en letras negras y cursivas, en ese pequeño y primoroso cartelito que apareció colgado sobre la cabecera de sus camas, y que hagan lo que hagan no podrán quitar.
A menos, por supuesto, que... no esté claro. Pero eso, honestamente, es sólo culpa de ustedes, porque a estas alturas ya todos deberían saberlo, si no al menos, sospecharlo.
Es la temporada... ¿de qué?
Seguramente van a tener un día divertido, intentando descifrar el ominoso mensaje. Tal vez se refiera a que... es la temporada de hacerse cariño, luego de tantas heridas y sufrimiento de la semana pasada. Es el momento de reconfortarse, de ir a dar una visita relajante al spa, de hacerse comida deliciosa, de ir a abrazar a tus amigos, o de quedarse acurrucado calentitos en la cama con alguien, para así engañar el frío de las noches, de las mañanas-- ¡Ah, espera! Tal vez es esa temporada, porque sí, ha estado horriblemente frío estos últimos días, y cuando empieza a caer la tarde, suaves copos blanquecinos comienzan a car desde el cielo, y pronto lo empiezan a cubrir todo de blanco...Seguro es eso, ¿no? ¡Comienza la temporada de nieve! Con sus guerras de bolas de nieve, y sus fuertes, y hombres de nieve, y abrigos y botas, y chocolate caliente... Sí, eso debe ser, se dicen a ustedes mismos, mientras entran a sus casas, encienden el fuego, y se arropan en su manta más abrigadita para ir a acostarse y dar por terminado el día, tratando de no pensar mucho en el cartel sobre sus camas, reconfortándose en la visión de la nieve cayendo afuera.

Tontos. Bufones absolutos. ¿Creen que dormirán esta noche? Oh, no, no. Pero ustedes no quisieron escucharnos, ¿cierto? No finjan que no les advertimos. No digan que no lo vieron venir.
Porque, ¿qué es lo que usualmente llega con la nieve? ¿Qué es lo que, quieran o no, les obligará a hacerse... cariñito mutuo? ¿Qué es esa vegetación insidiosa que se las arregla para deslizarse dentro de sus casas, sobre sus camas, y aparecer cuando menos lo esperan?
Les concedemos que usualmente aparece cuando todos ustedes están conscientes, está bien. Pero si el cartel estaba sobre sus camas, esa era una buena pista. Y, honestamente, siendo que el asunto no tiene ninguna gracia sin compañía, el que de pronto estén en la cama de otra persona, o que un desconocido aparezca en sus propias camas, no debería ser tan sorpresivo. Como tampoco debería serlo el que no puedan salir de sus camas-- vamos, conocen las reglas. Tienen que hacer lo que se les demanda, y sólo entonces quedarán libres... hmmmtaaal vez tras unas cuántas horas. Con todo el frío allá afuera, no querrán apresurarse y salir de la cama a congelarse, no, no. Aprovechen de compartir el calor, dormir otro par de horassi la incomodidad o la vergüenza se los permite, esperar hasta el amanecer para recién poder pensar en regresar a casa.
Aunque, si han llegado hasta aquí sin saber de lo que hablamos, probablemente merezcan quedarse en cama todo el resto del día. Pero ya lo saben, ¿no?
La temporada del muérdago ha comenzado.]
((¡Post deorgía CAMUÉRDAGOS!: muérdagos y cambio de camas, porque a veces los clásicos merecen un buen giro. Los personajes aparecerán en la cama de alguien más y estarán atrapados hasta que hagan lo que el muérdago quiere (que les dirá en una conveniente nota o algo), y un par de horas después de eso también. El muérdago puede tener el efecto que ustedes quieran, desde tomarse de la manito, a un beso francés, y todo lo que haya entremedio... y más allá WINK WINK. Es la temporada de volverse locos, claramente.))
Eso es. Eso es todo lo que necesitan saber. El mensaje se lee claro en letras negras y cursivas, en ese pequeño y primoroso cartelito que apareció colgado sobre la cabecera de sus camas, y que hagan lo que hagan no podrán quitar.
A menos, por supuesto, que... no esté claro. Pero eso, honestamente, es sólo culpa de ustedes, porque a estas alturas ya todos deberían saberlo, si no al menos, sospecharlo.
Es la temporada... ¿de qué?
Seguramente van a tener un día divertido, intentando descifrar el ominoso mensaje. Tal vez se refiera a que... es la temporada de hacerse cariño, luego de tantas heridas y sufrimiento de la semana pasada. Es el momento de reconfortarse, de ir a dar una visita relajante al spa, de hacerse comida deliciosa, de ir a abrazar a tus amigos, o de quedarse acurrucado calentitos en la cama con alguien, para así engañar el frío de las noches, de las mañanas-- ¡Ah, espera! Tal vez es esa temporada, porque sí, ha estado horriblemente frío estos últimos días, y cuando empieza a caer la tarde, suaves copos blanquecinos comienzan a car desde el cielo, y pronto lo empiezan a cubrir todo de blanco...Seguro es eso, ¿no? ¡Comienza la temporada de nieve! Con sus guerras de bolas de nieve, y sus fuertes, y hombres de nieve, y abrigos y botas, y chocolate caliente... Sí, eso debe ser, se dicen a ustedes mismos, mientras entran a sus casas, encienden el fuego, y se arropan en su manta más abrigadita para ir a acostarse y dar por terminado el día, tratando de no pensar mucho en el cartel sobre sus camas, reconfortándose en la visión de la nieve cayendo afuera.

Tontos. Bufones absolutos. ¿Creen que dormirán esta noche? Oh, no, no. Pero ustedes no quisieron escucharnos, ¿cierto? No finjan que no les advertimos. No digan que no lo vieron venir.
Porque, ¿qué es lo que usualmente llega con la nieve? ¿Qué es lo que, quieran o no, les obligará a hacerse... cariñito mutuo? ¿Qué es esa vegetación insidiosa que se las arregla para deslizarse dentro de sus casas, sobre sus camas, y aparecer cuando menos lo esperan?
Les concedemos que usualmente aparece cuando todos ustedes están conscientes, está bien. Pero si el cartel estaba sobre sus camas, esa era una buena pista. Y, honestamente, siendo que el asunto no tiene ninguna gracia sin compañía, el que de pronto estén en la cama de otra persona, o que un desconocido aparezca en sus propias camas, no debería ser tan sorpresivo. Como tampoco debería serlo el que no puedan salir de sus camas-- vamos, conocen las reglas. Tienen que hacer lo que se les demanda, y sólo entonces quedarán libres... hmmmtaaal vez tras unas cuántas horas. Con todo el frío allá afuera, no querrán apresurarse y salir de la cama a congelarse, no, no. Aprovechen de compartir el calor, dormir otro par de horas
Aunque, si han llegado hasta aquí sin saber de lo que hablamos, probablemente merezcan quedarse en cama todo el resto del día. Pero ya lo saben, ¿no?
La temporada del muérdago ha comenzado.]
((¡Post de