[La situación es extraña y compleja, pero la forma de proceder es simple. Una vez que se aseguró que esto no es un sueño o una alucinación de algún tipo, sólo quedan aceptar los hechos: acaba de salir desde un ataúd en un cementerio, en un lugar desconocido, que no parece Japón. Hay un pueblo a la distancia, al que por supuesto decidió acercarse para conseguir más información (que la del ridículo panfleto rosado), y unas criaturas rosadas que se encuentra más adelante en el camino, que comprueba para su sorpresa, no son maldiciones.
Una vez llegado al pueblo, las criaturas parecen indicarle insistentemente un edificio, y decide seguirles el juego. Lo que lo lleva a un... hospital, extrañamente lleno de gente y de esas mismas criaturas. Gente que parece enferma, y se pregunta si será el mejor lugar para conseguir información, o si tal vez debería retirarse para dejar que los profesionales trabajen.
Se pregunta también si todo esto será una alucinación producto de la fiebre que tiene, cosa que es de por sí bastante extraña, porque no es alguien que se enferme realmente... ¿Tal vez sí se murió y este es el más alla? Sigh. O tal vez sólo necesita un trago.]