[Y él va a ignorar también que sigues sangrando y de hecho estás dejando un pequeño camino en la nieve por eso. Hace una mueca algo frustrado y en silencio se trata de arrimar mejor tu brazo por encima.
No es fácil moverse contigo y hacerte de apoyo, le sacas poco más de una cabeza de altura, pero después de bastante esfuerzo consigue llegar a uno de los refugios y prácticamente va a patear la puerta para poder abrir.
Pesas, pero te va a arrastrar a donde pueda dejarte acostado ahí dentro.] No te muevas.