[Nota no sólo el cambio en tu rostro sino como cambian tus emociones, esa revelación como un fogonazo de esperanza.]
[Tiene un momento de confusión, a ver... ha visto regalos de casamiento raros, no te dice que no, pero ¿agujas, Doctor? De usted no lo esperaba. Hasta que te ve clavársela y lo único que siente es la tensión de esperar que funcione.]
[Y el alivio enorme de ver que sí, que está vivo y moviéndose, y casi quiere reírse de la alegría.]