[¿Cierto brujo que atiende una panadería aquí? Nop, para nada.
Y el problema es que el brujo decide trabajar solo, así que pide privacidad para eso. Pero ella es obstinada y al igual que otros niñitos del lugar quiere ver lo que está haciendo el brujo. Las ventanas y puertas están cerradas... pero ella es la única que logra ver que en lo más alto del techo hay otra que está abierta y puede colarse por ahí.
Sabe que no debe mirar, pero tiene mucha curiosidad. Si lo hace un poco... no va a hacer daño.
Queda maravillada con lo que hace el brujo, lo ve trazando líneas y un círculo con completa facilidad sin notar su presencia. Y entonces llega a la conclusión de que la magia... se dibuja.]