[Oh, le basta con haber visto uno de tus ojos antes, y conocer tus expresiones, la atención e indiferencia con la que puedes mirar algo o alguien a la vez, tus gestos ariscos. Aunque verte más joven es... extraño. Le gustaría saber más de ti en ese tiempo, y a la vez no.
Pero ese cambio brusco lo pone en alerta de inmediato, cerrando su mano de prótesis casi como listo para desenfundar un arma. Te busca, en medio de ese caos, y te nota allí, intentando acercarse...]