[Hace una mueca mientras llega a la misma conclusión, recordando lo que le han contado antes.] Es obra de este maldito lugar...
[Y la escena frente a ellos no parece detenerse. Puede verse a sí mismo eferrándose a una de las ramas que quedó luego de haber estado buscando entre los restos de Groot alguna rama que no estuviera completamente carbonizada; recuerda claramente haber exigido una maceta con tierra fresca en cuanto el resto de los Xandarianos se habían acercado a auxiliarlos. En ese momento no sabía si iba a funcionar--- ni siquiera sabía lo que estaba haciendo, solo era intento desesperado por conservar algo, lo que sea, de su amigo.]
Ya basta. [Es difícil concentrarse en su rabia con aquel completo desconsuelo sofocándolo, pero se reúsa a ceder ante este sitio.] ¡Suficiente!
[De pronto todo desaparece y, con un sobresalto, finalmente se despierta en la superficie de metal sobre la que estaba durmiendo.]