[Lo primero es quedarse embobada admirando el lugar, porque incluso en ese estado de semi conciencia no puede evitar el sentimiento de maravilla cada vez que se encuentra con una experiencia nueva. Nunca había estado dentro de un castillo, y este es ciertamente impresionante, al menos para ella.
Una vez que su mirada llega a los tronos se detiene un momento, curiosa por la sensación de que te conoce, pero no puede determinar de dónde aún.]