[Y va a hacer mÁS caras tontas cuando en un espejo por ahí cruce la mirada con el hombre detrás del biombo, y ambos se sonrían con timidez y nerviosismo.
Un bello momento, hasta que una flecha atraviesa por el biombo y se incrusta contra el espejo, sobresaltándolos a todos, haciendo que el hombre y ella se levanten alarmados para ver si el otro está bien.]