[No, es posible que no lo reconozcas, aunque... tal vez sí. Porque al mismo tiempo, esta cama en la que ahora estás recostado, está habitación, te son muy familiares. Es tu cuarto, en el que has vivido los últimos dos años. Y ese que está sentado en una silla junto a la cama, mirándote con ojos brillantes y una expresión a la vez fascinante e inquietante en su rostro es tu compañero de departamento, Eliot Cardale. Eli. Te gusta tener su atención así, incluso si lo ves doble y borroso, pero todo se ve doble y borroso, porque te has bajado casi toda una botella de escocés, y aún ahora tomas un trago largo, buscando embriagarte aún más...
Cuando Eli te tiende la bolsa con las pastillas, recuerdas por qué. Quieres morirte.]