[Pero qué pasa si se pone a caminar de nuevo por la salita, ojeando esos "apuntes" y... leyendo algunos en voz alta.]
¿"Aletas y colmillos y hermosas escamas..."? Bien, ¡pero si tenemos el alma de un poeta aquí! [Te sonríe, y luego agrega.] Estoy un poco sorprendido de que estuvieras pensando en pescados mientras hablábamos de todo esto. No juzgo, cada quién sus propios gustos, pero es novedoso.