[Estuvo inicialmente ayudando a juntar leños, sacar ropa y cosas a secar, y ver que nadie le faltase un brazo o alguna cosa horrible por el estilo. Pero al ir pasando las horas que ya se organizaron todos mejor terminó rindiéndose un poco a su cansancio y quedándose frente a una de las fogatas, donde ahora pueden encontrarlo, medio cabeceando ahí. Se niega a bajar completamente la guardia todavía.]