[Se queda callado un segundo más, antes de dejar escapar una risa suave, y tratar de hablar con más liviandad.]
Entonces, eso es todo. Me amas, y yo lo sé, y no hay necesidad de que me lo estés diciendo todo el tiempo. [Sólo que sí, porque él necesita saber constantemeente que no vas a dejarlo, pero detallES.] Está bien, cher.