[Puede que te interese más cuando alza una mano para apoyar su índice sobre tu pecho. Índice que, como todos sus dedos, tiene una uña larga y peculiarmente afilada, la que va a comenzar a deslizar juguetonamente por tu pecho y hacia arriba, como quién no quiere la cosa.]
Podrías decir que tengo una estrecha relación con ese límite del que hablabas. El borde de la muerte. Una relación basada en la necesidad.
Y tal vez mí necesidad y tu... ah, interés podrían beneficiarse mutuamente.