[Literalmente esta demasiado impactado para hablar. Mira el laúd como si fuera la cosa más hermosa y delicada que tuvo en sus manos, toca apenas las cuerdas y prueba el peso.]
...Es hermoso, Geralt. [Quizás hasta le tiembla un poco la voz y todo, porque es un regalo importante pero que venga de ti le pega un poco más.]