Está bien. Tiene sentido. [Va a incorporarse un poco para dejar la botella al lado de la cama y sacarse la corona para poder acurrucarse más cómodo.]
Sé que va a sonar algo estúpido, pero me recordó a lo que pasó allá. Con el golem y el banco. [...] Mi punto es, supongo que me alegra haber podido hacer algo esta vez. Para ayudarte.