[Es una buena forma para enfocar en algo más que la propia miseria. Ya te había ofrecido un hombro antes y te hacía falta más que eso por lo visto.
Cuando entra da un vistazo leve por el cuarto, ha estado en lugares peores pero no hace falta hacerlo notar. Y bueno... la sutileza no es lo suyo, porque con la puerta cerrada y sus manos libres te va a tratar de empujar (o acorralar) para que te sientes en ese viejo colchón mientras él se mantiene de pie frente a ti.] ¿Cuánto tiempo tengo?