[Acá un pobre hombre como con cinco coronas de flores encima a las que no se pudo negar aún cuando intenta no entrar en pánico mientras murmura para sí mismo cómo un lunático por no saber qué rayos está pasando.] ¿Marc? ¿Me oyes? No puedo sentirte-- ¿Marc? Oh, repámpanos, ¿ahora qué?