Estamos en otra dimensión, como las que abren los Devil Arm. Acá llega gente de todas partes, tiempos, mundos ¡Lo que quieras! Tómalo como un intercambio cultural.
Lo malo es que no hay salida hasta que este lugar se le de la gana. Lo bueno es que no nos van a extrañar porque el tiempo no corre fuera. ¡Vacaciones!