[Uno de los lugares que es bastante susceptible al fuego es, sin lugar a dudas, la biblioteca. Después de todo, hay una enorme cantidad de cosas que se pueden quemar ahí. Y cierto bibliotecario que pasa la mayor parte de su tiempo ahí adentro.
No intenta salvar los libros, pero necesita asegurarse de que no haya nadie que haya quedado atrapado ahí. Va a tardar mucho en siquiera intentar salir.]