[Sí estaba esperando que lo contradijeras, que le discutieras. Cuando no sucede se permite seguir hablando, perdiéndose en sus recuerdos... en lo que cree que son sus recuerdos.]
Siempre me culpas por lo que pasó, e ignoras tu propia responsabilidad en todo ello. Que tu también lo querías. Las cosas que prometimos, que hicimos...
Eres tan bueno en negarte las cosas que deseas, sólo porque piensas que no deberías hacerlo. Es enfurecedor.