Por supuesto que se sintió real. ¿Cuál sería la gracia si no? [Te da un par de palmaditas cariñosas en una mejilla, silly Louis, y luego se pone su propia máscara.]
Vamos, Louis. Dejemos estos pensamientos sombríos de lado, que es seguramente lo que quieren, y disfrutemos del carnaval.