[En medio de los juegos y cosas relajantes, él parece haber planeado una cita importante o algo, porque por intervención de cierta vampirita muy convincente está vestido en un traje impecable blanco (cuyos pantalones está seguro no necesitan estar tan apretados), con el pelo arreglado, hasta tiene un perfume de buena calidad y todo.]
[El asunto es que nada de ello le sirve para lo que necesita hacer, que es terminar de arreglar su pobre cabaña medio destruida por yetis, así que ahí anda, mirándola dudosamente mientras considera mandarlo todo al diablo y sólo irse a buscar un chocolate caliente y ya.]