[Él va a echarle una mirada a algún reloj que tengan por ahí, para calcular el tiempo, y luego... dedicarse a mirarte, como el creep que es. Y porque no ha podido hacerlo en mucho tiempo, y ahora puede hacerlo a placer.
Va a toquetear tu rostro también, tu pelo, despacio, sólo porque puede, recordándose cómo era poder hacerlo.]