[Pero él todavía parece un poco conlfictuado, y lleva una mano a tu pecho para detenerte despacito.]
Espera-- Kim. Antes de empezar con eso, quiero que sepas que voy a pensar en todo esto, ¿está bien? No sé cuánto tiempo me tome, pero lo haré. [Sube su mano de tu pecho a tu cuello, tu quijada, para mirarte bien mientras habla.]
Y, escucha... No puedo dejar de pensar en ti. Me vuelves loco, sí, pero entonces te veo sufrir y quiero prenderle fuego a todo. No sé cómo será el futuro ni cómo podría funcionar para nosotros, pero sí sé que no quiero que estés lejos, y que voy a abrirme camino a puñetazos de ser necesario para asegurarme de tenerte conmigo.