[Él no aparta mucho la mirada de tu padre, o no lo hubiera hecho, si tú no hubieras hecho ese gesto, y luego dicho eso otro. Pierde su expresión, viéndose algo abrumado también. Te queda mirando un momento, como si no supiera qué decir, o como si quisiera decirte algo, pero se detiene, y vuelve a ver a tu padre.]
Y sé que lo que te quité-- tu vida, no puedo devolvértelo. Como tampoco puedo devolverte a tu familia, ni deshacer el dolor que les causé. Pero esto... puedo darte esto. Puedo darles una última oportunidad.
... Espero que puedas perdonarme. Pero entiendo si no puedes hacerlo. [Traga con dificultad y suena ligeramente torturado cuando vuelve a decir:] Pude haberte dejado ir.