[Por la manera en que dices eso último, el modo en que lo has descrito y las cosas que dijiste mientras estabas aturdido, no es muy difícil sumar dos mas dos y concluir que te maltrataba cuando eras un niño. Recuerda haberse preguntado el motivo de los cortes en tus brazos, y ahora siente una puntada de furia mientras sospecha que tu hermano seguramente fue parte de ese motivo.]
[Aunque consigue controlar su expresión, simplemente frunciendo el ceño, y acercándose con gesto contenido a. seguir lavándote. GRRR.]
... Creo que me gustaría conocerlo, algún día. Suena como la clase de persona que merece una probada de su propio chocolate.