[Sigue el movimiento de tu vaso con la mirada, pensando algo similar. Bien... tal vez sería conveniente. Sueles ser más receptivo cuando estás ebrio.]
Diría que no parece un asunto de voluntad, meramente. [Se acerca despacio para alcanzar la botella en la mesita que está entre ambos, rellenando su propio vaso y luego haciéndote un gesto como de pregunta con la misma botella. ¿Quieres?]