[Te mira de arriba abajo.] Tus ropas... tampoco son como las de la aldea, ¿De dónde vienes? Te-¡¿te envió Tsukasa-chan?! No, no puede ser. Aún es invierno y la batalla final sería en primavera [se le nota realmente preocupado. No puede ocultar sus verdaderas emociones en este momento.]