[Quizás es en un rincón del pueblo cercano a su cabaña, desde donde sale humo de la chimenea y el aroma a muchas hierbas-- no una cura, porque aún no ha podido encontrar eso, pero sí una pócima expectorante que está ayudando a esta hechicera, sentada y hecha bolita frente a la chimenea, a no ahogarse completamente mientras sigue tosiendo tulipanes rojos.]