... Yo no soy religioso. No creo en ningún dios. Ninguno de mis compañeros lo hace, ni le enseñaríamos a nuestro... [traga un poquito, emocionado] nuestro hijo a hacerlo.
[...] Pero si recuerdo esta conversación, yo... Se lo diré. Le contaré que en alguna parte hay un Gato al que le gusta jugar con los niños. Y que podría ayudarlo, si alguna vez lo necesita.