[Por acá hay un niño de unos doce años que no parece realmente asustado ni confundido... no es la primera vez que está aquí, ni la primera vez que el lugar luce como un parque cuando él lo visita.
Está buscando a una persona en particular, pero seguramente llame la atención que su gorra diga SI ME PIERDO, DEVOLVER A DUEÑO/A DE PERRITOS.]