No es una mordida en todos los casos, con darle un poco de su sangre es más que suficiente. Con solo unas poas gotas ya puede convertir a quien sea en demonio. Eso si, de muy bajo nivel. Si quieren más sangre de su líder, deben ser buenos lacayos y devorar más humanos. Cuantos más humanos come, más destaca frente a otros y se va volviendo más poderoso hasta que llama la atención de Muzan.