[Detrás de cada intriga mágica, usualmente hay un mago responsable. En este caso son muchos, pero podríamos decir que uno de los primeros responsables es este mago en particular.
A lo largo de la noche estará en una esquina, luciendo su más espléndida túnica dorada con estrellas, frente a una alta tinaja de piedra. Si se acercan, les ofrecerá la oportunidad única de poder sumergirse en alguno de sus recuerdos más felices, y revivirlos casi como si estuvieran allí. Y cuando sea su turno de una demostración mágica, llenará el cielo del salón con un espectáculo de fuegos artificiales de todos colores, que tomarán formas de criaturas fantásticas y se moverán como si tuvieran vida propia.]