[Por un momento cruza una sombra de rabia por su expresión... pero luego vuelve a sonreír, más pronunciadamente, y se inclina más hacia ti, llevando su mano libre a tu cuello, sujetándote así contra el suelo en un reflejo de cómo lo tuviste tú hace un rato.]
Oh, pero ese es el asunto, ¿no es así? No es cierto que nunca hagas cosas que no quieres. Maldición, Eli, la mayor parte del tiempo haces cosas que no te interesan sólo para que el resto de mire hacerlas.