[Se queda él también ahí en su sitio un momento, fascinado un momento al pensar que podría haber continuado.
Pero tras un momento registra tus sonidos, y empieza a moverse hacia ti, acuclillándose lento a tu lado, al tiempo que hace lo opuesto, y... apaga un poco tus nervios, o al menos los entumece, para que sea más fácil que olvides el dolor.]