[... De hecho, no. Porque se queda mirándote muy serio, y es una suerte que haga frío y pueda culpar a eso si sus orejas enrojecen un poco. Se siente un poquito estúpido, pero al mismo tiempo no puede negar el cosquilleo que siente al escucharte decir eso, o lo mucho que le gusta que lo digas. El que aún es algo conmocionante y abrumador.]