... lo sé, Vic. [Lleva su mano sobre la tuya para apretarla un momento. Ella siempre está así de fría. Ahora tiene los ojos con rastro de llanto y sigue respirando por la boca, todavía le duele respirar y por la parte mental, sabe que va a estar teniendo pesadillas con el lago y Serena. Pero te sonríe un poco] No tardo.