2/3
[Y la luz blanca no tarda en iluminar una escena, familiar para él, desconocida para tí... excepto por el niño rubio -demasiado delgado como para que sea saludable-, rodeado de otros niños que no tardan en arrojarle "agua bendita", mientras ríen y comentan entre ellos "Natsume, siempre dices que puedes ver cosas extrañas, esta agua que tomamos del templo seguro te purificará", "ninguno de tus familiares quiere quedarse contigo, debes tener una maldición, ¿no es así? Nosotros la eliminaremos por tí".
El niño sale corriendo cuando ve al resto tomar ramas puntiaguas y rocas, huyendo a la casa donde vive actualmente, antes de que puedan golpearlo con ellas.]