[Pensamientos suaves. Pensamientos gentiles. Pensamientos no de cómo desearía retorcerle el cuello y arrancarle los dientes uno a uno al desgraciado que--
Suave. Gentil. En ese momento no necesitas que sea un monstruo. Ya te enfrentaste a un monstruo. Toma aire y lo suelta lento, sin quitar la mano de tu cabeza, dejando que seas tú quién decida qué tanto puedes dejar que te toque.
Eso sí, ya no SOPORTA estar encerrado sin hojas ni naturaleza, así que de dónde están sentados va a empezar a crecer pasto y musgo y que deje de verse cómo el lugar dónde te hicieron algo tan cruel]