¡Sé que no lo soy, ¿pero a cuántos de ellos llegaste a ACOSARLOS sin que siquiera pudieran tratar de asimilar dos segundos que están sólos! ¡Y no, no sé por lo que pasaste, ni me interesa saberlo! ¿La diferencia? ¡Yo no soy la que llegó contigo a hacerte mil preguntas cuándo estás asustada y lo único que quieres es ir a casa!