Sí. Dado que aún no aparecen señales de envenenamiento en los tejidos alrededor de las incisiones, ni hay rastros de espuma en la boca de la joven, podemos asumir que son incisiones hechas para simular una serpiente, o la mordida de una serpiente no venenosa, o la mordida de una serpiente de veneno lento, o que fue mordida luego de morir. En cualquier caso, nos confirma lo primero, y que el asesino se dio mucho trabajo para dejarnos ese rastro.