Cuando supe de mis poderes estaba asustado y confundido y enojado. Por accidente llegué a conocer a un fantasma que me llevó al inframundo con mi padre. Después de eso pasé mucho de mi tiempo ahí abajo, aprendiendo a controlar mis poderes y tratando de ganar el aprecio de mi padre.
Ser hijo de Hades me deja viajar entre el mundo exterior y el inframundo. Estando en el mundo me di cuenta que los únicos lugares donde me sentía... centrado era en los cementerios, en la oscuridad de la noche, entre fantasmas. Lo cual supongo no es raro. Los demás sienten algo similar con el dominio de su padre/madre olímpico.