[Guarda silencio por un momento, viendo a Leo a la distancia.] La mano de los dioses puede parecer que está en todas partes... pero no es así, tienen límites, como todo en este mundo. Si pudieran influir o manipular completamente a las personas, todos seguirían creyendo en ellos.
Si, quizás manipularon la situación para que yo conociera a Leo, pero quien se enamoró fui yo. Ya han pasado meses desde entonces... y aún quiero estar con él.