[... Ay, directo en el kokoro. Pone una expresión llena de eMOCIONES, por un momento, antes de intentar controlarse un poco. Baja la mirada cuando no lo consigue demasiado, y empieza a quitarse el reloj que lleva en su muñeca, sin decir nada. Cuando termina, extiende el brazo para que puedas verlo: en la muñeca, donde antes cubría la esfera del reloj, tiene un tatuaje con exactamente el mismo dibujo.]