[Se queda mirándote un momento, sintiendo el impulso de tocarte de nuevo. Y se siente en partes iguales aliviado y... culpable, para variar. Intenta ignorar el nudo en su estómago, y sale de tu habitación lo más silenciosamente que puede, juntando la puerta.]
[Y va a pasar las siguientes horas gritándole silenciosamente al fondo de su vaso de vodka y lloriqueándole a Gaby.]