"Ser, más que parecer." Es el lema familiar de los Bowen. De cierta irónica manera, siempre me ha parecido extrañamente tranquilizador. [Hace una pausa, y comienza de nuevo.]
Cuando era un niño, aún aprendiendo las letanías que mi instructor recitaba para mí, viviendo solo en la casa que también destinó para mí, me gustaba sentarme junto a las ventanas en los días de niebla espesa en Londres, y observar.