Tal vez. Pero preferiría que no lo averigüemos. [Toma la camisa de tu pijama, y aunque generalmente no es muy delicada, ahora sí lo va ser, ayudándote a meter la mano y moviendo despacio, muy, muy despacio y con cuidado, la tela alrededor de la forma de tu brazo para que tengas que moverlo lo menos posible]